Capitulo 624
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Capítulo 624
Al salir del edificio, Lin Yi llevó a Liang Ruoxu a su trabajo.
Pero a una distancia de más de 200 metros, Liang Ruoxu le pidió a Lin Yi que se detuviera, temiendo que otros vieran.
Después de dejar a Liang Ruoxu, Lin Yi condujo de regresó a la tienda.
Después de completar la última tarea, el humor del Lin Yi mejoro mucho.
Sólo quería vender todo lo que podía.
Después de abrir, el negocio se llenó.
Lin Yi se dio cuenta de que una gran parte de la gente que venía a comer, sólo venía a admirarlo.
También había muchas niñas y señoritas ricas, y el consumo promedio por mesa era de 1.000 yuanes.
“Jefe, hoy olvidé traer mi billetera, pero ¿puedo comer igual un plato de arroz frito con huevo?”
“A menos que seas copa E …”
“No soy copa E, pero ¿puedo pagar con mi cuerpo?”
“Todas las chicas que entran en esta tienda quieren pagar con su cuerpo, ¿Quién eres …? ¿Eh?”
Lin Yi, que estaba cocinando, sintió que algo andaba mal.
El tono y el acento de la voz de esta persona le sonaban muy familiar.
Dándose la vuelta, encontró a Wang Ying parada en la puerta.
Wang Ying vestía de forma muy elegante, con una camisa blanca y un blazer de dama en la parte superior, mientras que, en la parte inferior, llevaba una falda de trabajo a juego con unas medias color carne que también combinaban con sus tacones negros.
A primera vista, había venido directamente de la empresa sin cambiarse de ropa.
“Hermana Ying, ¿Por qué estás aquí?”, dijo Lin Yi con una sonrisa:
“¿No dijiste que vendrías después de terminar el trabajo que tenías entre manos?”
Wang Ying sabía que Lin Yi había abierto una tienda en este lugar, pero debido a que tenía mucho trabajo entre manos, no había venido.
Pero ayer, Wang Lu le contó a Wang Ying lo que había sucedido en la tienda.
Ella no pudo resistirse más, así que vino corriendo durante su descanso para almorzar.
“La razón principal es porque no esperaba que tu tienda fuera tan popular, además Lulu me dijo que estabas haciendo todo solo, así que vine a ayudarte”
Mientras hablaba, Wang Ying puso su bolso encima del refrigerador, se inclinó hacia Lin Yi y susurró:
“Antes de venir aquí, hable con la secretaria Qiu, y ella me dijo que la presidenta Ji y la señorita Guan de Yaluo Design, habían ido a hablar sobre el Puerto Wang Jiang, así que no vendrá ni sabrá que estuve aquí”
“Eres una amante realmente perfecta”
Wang Ying sonrió coquetamente.
“Si ni siquiera tuviera esta habilidad, no habría nada que te pudiera mostrar”
“No digas eso, ese cuerpo que tienes, cualquiera lo querría mirar”
“No te preocupes, los demás solo pueden mirarlo, pero tú puedes hacer lo que quieras”
Diciendo eso, Wang Ying incluso le dio a Lin Yi un beso en la mejilla, sin preocuparse mucho.
Lin Yi rodeó con su brazo la cintura de Wang Ying y le dio un apretón en el trasero.
“Esa respuesta también es perfecta”
“Tómatelo con calma, no te apresures”, reclamó Wang Ying:
“Date prisa y cocina, te ayudaré”
“¿Has comido? Pide lo que quieras, te lo prepararé”
“No te preocupes por mí, espera hasta que los clientes se vayan”
“¿Cómo puedo hacer eso? No puedo dejar que pases hambre”
“No te preocupes, no soy una extraña para ti”, dijo Wang Ying:
“Puedo comer más tarde, es más importante hacer negocios”
“Si tienes hambre, dímelo, no te avergüences”
“De acuerdo”
A los ojos de Lin Yi, Wang Ying heredó perfectamente las buenas costumbres de las mujeres chinas.
Sufrir primero y disfrutar después.
Aunque tiene una buena apariencia y un cuerpo voluptuoso. Después de conocer a alguien que le gusta, se enfocará en la familia y en su hombre.
Esto es algo demasiado raro.
La aparición de Wang Ying alivió mucha presión a Lin Yi.
Además, su habilidad con el cuchillo era mucho mejor que Ji Qingyan, lo que también le facilito el trabajo a Lin Yi, que sólo se encargaba de la cocina.
Gracias a esto, la entrega de los platos fue mucho más rápido.
Pero seguía siendo difícil atender a todos los clientes, tanto así, que incluso había una larga fila afuera de la tienda. Al menos había 30 personas, esperando incansablemente.
Algunos estaban allí para probar la comida de la tienda, otros estaban haciendo la fila para apreciar la belleza de Lin Yi.
En ese momento, en la calle Zhengyang, dos ladrones de piel blanca caminaban en dirección a la pequeña tienda.
Eran dos hombres, cuyos nombres eran Lewis y Nathan, que procedían de Estados Unidos, y estudiaban en la Universidad Politécnica de Zhonghai.
En cierto sentido, eran hermanos pequeños de Lin Yi.
“Lewis, escuché que este nuevo restaurante tiene comida muy deliciosa, ¿Quieres probarla?”
“¡Maldición, conozco esa tienda!”, reclamó Lewis:
“Hace unos días, conocí a una chica china y estaba a punto de conquistarla, pero al final me dijo que se enamoró del dueño de esa tienda y luego me bloqueo de WeChat, ahora no me puedo poner en contacto con ella”
“También he oído de muchas chicas de nuestra escuela que dicen que el dueño de esta tienda es muy guapo, pero creo que solo están exagerando”, Nathan dijo:
“Realmente no creo que haya un chino tan guapo como tú”
“Yo también lo creo, sólo puedo decir que su visión no es lo suficientemente buena, por no hablar de mí, incluso cualquier chico blanco al azar, es mejor que estos chinos”
Lewis se encogió de hombros y se quejó, pero no se dio cuenta de lo enojado que estaba.
“Rechazarme por el dueño de un restaurante, será su mayor pérdida”
“Así es, no te preocupes tanto”, dijo Nathan:
“Esta tienda se ve bastante bien, pero no sé si podré comer un auténtico bistec aquí”
“Tu forma de pensar es demasiado ingenua, esto no es Estados Unidos, es difícil comer un auténtico bistec aquí”, dijo Lewis:
“Tampoco tienen vinos auténticos. Si mi papá no hubiera venido aquí a trabajar, yo no habría venido a este lugar”
“Aunque los bistecs de China no son muy buenos, afortunadamente, son baratos, las chicas son muy hermosas, y la escuela no trata con mucho cariño, así que prácticamente estamos de vacaciones aquí”, Nathan dijo:
“Al fin y al cabo, en este lugar nos respetan mucho”
“Dios mío, no puedo creer que haya que hacer una fila”, dijo Lewis.
Cuando los dos caminaron hacia la entrada de la tienda, se encontraron con una fila de más de veinte personas, todas esperando para poder entrar y comer.
“Es la primera vez que veo que hay que hacer fila para entrar en un restaurante en la calle Zhengyang”, Nathan se sorprendió un poco:
“Tal vez hemos venido al lugar correcto, es muy probable que su comida sea buena”
Lewis se encogió de hombros.
“Es posible, pero no quiero hacer fila. No tengo mucha paciencia”
“¿Qué tal si vamos a otra tienda?”
“No es necesario”, Lewis se tocó la nariz y dijo en tono de broma:
“Tengo muchas ganas de entrar y ver cómo es el dueño de esta tienda”
“Oh, cálmate, parece que quieres golpearlo”, dijo Nathan:
“Aunque aprendiste boxeo, la ley y el orden en China son muy estrictos, es mejor no meterse en problemas”
“No te preocupes”, Lewis hizo un gesto con la mano y dijo con indiferencia:
“No quiero pelear, y tampoco tengo la costumbre de atacar a los débiles, así que no tienes que preocuparte, solo entrare a comer. Quiero probar que tan malo es su bistec”
