Capitulo 282
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Capítulo 282
El reportero se quedó boquiabierto, ¡qué demonios es esto, cómo es que no sigue la rutina oficial!
“Sr. Lin, ¿admite la acusación de la Fundación Tianhong?”, preguntó de nuevo el reportero.
“Por supuesto que lo admito”, dijo Lin Yi:
“Es cierto que no hemos hecho pública la información concreta sobre las ayudas, pero aunque lo admitamos, no podemos”
“¿Parece que el Sr. Lin no tiene la intención de resistirse?”, preguntó una reportera.
“No puedo decir eso, tengo que luchar simbólicamente de todos modos, de lo contrario perderé la cara”
“Sr. Lin, acabo de ver que el superdeportivo que conduce es el Lykan HyperSport que solo hay 7 en el mundo, su precio nacional es de 66 millones de yuanes, ¿lo compro con dinero de la caridad?”, preguntó una reportera.
“Por supuesto, de lo contrario cómo podría tener tanto dinero”
Los reporteros se miraron, ya no sabían que preguntar.
Sus respuestas, eran las que querían, pero esto no tenía ningún sentido.
Esto demuestra que son muy poco profesionales.
En este momento, He Yuanyuan y Qi Xianzhao tenían el deseo de morir.
“¡Qué tontería estás diciendo! Me está haciendo enojar”
“Yuanyuan, ¿crees que nuestra empresa irá a la quiebra?”
Para que alguien como Qi Xianzhao hiciera tal pregunta, demostraba lo preocupado que está.
“Oh, la bancarrota podría ser una luz”
Bajo la multitud de reporteros, Lin Yi ingresó al tribunal.
Era la primera vez que venía a un lugar como este, así que todavía le era un poco novedoso.
Pero por dentro, su corazón ni siquiera se agito.
El pie de foto decía: «Feliz de ser acusado hoy en el tribunal»
“Jefe, ¿está nervioso?”, preguntó He Yuanyuan en voz baja.
“No estoy nervioso”, dijo Lin Yi:
“Mira a esa empleada, su cara es redonda y bastante bonita, también lleva uniforme, quiero cazarla para que sea mi secretaria, ve a investigar por mí”
“¡Investiga mi trasero, puedes ser más serio!”, Yuanyuan reclamó:
“¡Lo creas o no, le diré a la hermana mayor que estas coqueteando con chicas!”
“Uh … solo bromeaba”
En este momento, Zhao Zhengyang y Qu Nan, estaban en el backstage del tribunal descansando.
De acuerdo con la normativa pertinente, no se le permite ni al demandante ni al demandado estar aquí.
Pero debido a que este es el patio trasero de la familia Zhao, nunca habían perdido una demanda, por lo que Zhao Zhengyang estaba aquí como si estuviera en su propia casa.
Aparte de Zhao Zhengyang y Qu Nan, había otras personas aquí.
El más llamativo de ellos era un extranjero de pelo rubio y ojos azules, muy alto y de aspecto muy fuerte, que era el guardaespaldas de Zhao Zhengyang.
Frente a Zhao Zhengyang, estaban sentados un hombre y una mujer.
Ambos eran mayores, casi en sus cuarenta y su ropa y vestimenta son muy diferentes a las de Zhao Zhengyang.
La vestimenta era muy normal e incompatible con el entorno serio en el que estaban.
El hombre entre ellos es Guo Yuntao, el director del Orfanato Esperanza de Zhonghai.
La mujer, llamada Li Sulan, es la directora del Orfanato de las Flores Rojas en Yangcheng.
Zhao Zhengyang ha encontrado ahora dos orfanatos, previamente ayudados por la Fundación Ling Yun.
“Ustedes dos, no se pongan nerviosos, solo digan los que les dijimos”
“Sr. Zhao, ¿no romperás tu promesa?”, preguntó Guo Yuntao con nerviosismo.
“No te preocupes, te lo prometí, así que definitivamente lo haré”, dijo Zhao Zhengyang:
“Mientras seas obediente, si haces lo que digo, te daré los 500.000 en efectivo”
Con eso, Zhao Zhengyang agitó la mano y Qu Nan sacó dos maletas de la parte de atrás.
La maleta contiene en su interior varios fajos de billetes.
Guo Yuntao y Li Sulan se quedaron mirando.
Aunque tienen un orfanato desde hace tantos años y han recibido mucha ayuda, pero la mayor parte eran suministros y las donaciones no son muchas, era la primera vez que veían una cantidad tan grande de dinero en efectivo.
Al ver las expresiones de los dos, Zhao Zhengyang estaba muy satisfecho, cruzo las piernas y dijo:
“Supongo que ustedes dos nunca habían visto tanto dinero, mientras se porten bien, el dinero pronto será suyo, suyo y no del orfanato”
“Bien, bien, definitivamente cooperaremos”
Zhao Zhengyang asintió con satisfacción, incluso había pensado en el momento en que Lin Yi perdiera el caso.
¡Maldita sea, cómo te atreves a estafarme, hoy te derribare para siempre, nunca más podrás ponerte de pie!
En este momento, la secretaria de Zhao Zhengyang entró desde afuera.
“Sr. Zhao, hemos hecho una clara investigación sobre la situación en el exterior, esa persona llamada Lin Yi, parece haber abandonado su resistencia”
“¿Realmente es tan cooperativo?”
“Sí, las pocas preguntas que le hicieron los periodistas, las respondió todas positivamente, además admitió él mismo que realmente no habían hecho el anuncio público”
“Además, vino aquí hoy en Lykan rojo con un precio nacional de 66 millones de yuanes, también admitió que lo compro con fondos públicos, ahora con todas estas pruebas y con lo que ha hecho, es posible que no solo pierda dinero, sino que enfrentar una sentencia de cárcel”
“Jaja …”, Zhao Zhengyang se rio:
“Este es el efecto que quiero, hoy no sólo le haré pagar el dinero, sino también le haré ir a la cárcel, ¡quiero que mire cómo me llevo a Ji Qingyan!”
“No creo que sea un gran problema, esta es nuestra gente y nosotros podemos sentenciar que vaya a la cárcel”, Qu Nan dijo:
“Es la primera vez que veo a una persona tan audaz, utilizando los fondos públicos”
Zhao Zhengyang encendió un cigarrillo con una sonrisa en la boca.
Pensó que la demanda de hoy podría requerir cierto esfuerzo, pero no esperaba que fuera tan fácil.
“¿No es esto lo que queremos?, este es el efecto que quiero”
“Supongo que esta persona llamada Lin Yi nunca habría pensado que acabaría en esta situación hoy”, dijo Qu Nan con una sonrisa.
“Ni siquiera mira su propia virtud, no solo le robo una mujer al Sr. Zhao, sino que también fue el primero en hacerlo en todo Zhonghai”, dijo la secretaria.
En ese momento, entró un empleado uniformado y le sonrió a Zhao Zhengyang, diciendo:
“Sr. Zhao, es hora de la sesión del tribunal, podemos salir ahora”
“Bien”, respondió, Zhao Zhengyang se adelantó y se dirigió a la sala.
Al ver que Zhao Zhengyang se acercaba, los reporteros sentados empezaron a tomar fotos, dispuestos a recoger más información para regresar.
Pero el resultado de esta demanda ya era obvio para ellos, no había nada que extraño que esperar.
En primer lugar, el propio demandado había admitido que, efectivamente, no había hecho públicas las ayudas.
En segundo lugar, también admitió que había comprado un superdeportivo por un valor de más de 60 millones de yuanes con fondo público. Por actos como éste, el tribunal le condenará sin duda a muerte y no le dará ninguna oportunidad.
Además este sigue siendo terreno de la familia Zhao, cómo se decidirá el resultado final, todo depende de las palabras de Zhao Zhengyang.
Así que, por su parte, sólo puede esperar a que el caso termine y luego escribir algunos pequeños artículos para arrojar agua sucia sobre la Fundación Ling Yun.
Fue realmente fácil ganar este dinero.
“Sr. Lin, realmente no esperaba que nos encontráramos de nuevo en un lugar como este, es realmente triste”, Zhao Zhengyang dijo con una sonrisa.
