Capitulo 208
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Capítulo 208
“¿Que?”, Lin Yi estaba atónito.
“¿No se fue de viaje de negocios? ¿Regresó temprano?”
“Quizás no ha estado en un viaje de negocios, sólo me ha mentido”
Ahora Lin Yi entendía lo que estaba pasando, se suponía que su esposo había cambiado su vida, pero volvió a salir para burlarse ella.
Acariciando el hombro de Wang Ying, Lin Yi dijo:
“Es mejor que lo haga yo, tú cálmate”
“Estoy bien”, dijo Wang Ying:
“Soy una mujer grande, no soy tan frágil como crees, sólo déjame digerir este asunto”
“¿Cómo vas a digerirlo? ¿Qué quieres hacer?”
“¿Qué más puedo hacer?, el divorcio por supuesto”, dijo Wang Ying a la ligera.
“Dicen que es mejor destruir diez templos que arrepentirse de un matrimonio, pero a estas alturas, yo también soy más partidario del divorcio, no hay necesidad de gastar tiempo en él”, Lin Yi dijo:
“Si necesitas mi ayuda, recuerda llamarme”
“Bueno”, Wang Ying asintió y no dijo nada más.
Parece que debido a este problema, la mentalidad de Wang Ying se volvió muy tranquila al conducir.
Al cambiar de carril y al adelantar, temblaba el corazón de Lin Yi con cada acción.
Le llevó menos de treinta minutos volver a la casa.
Los ladrones son horribles.
“Gracias por lo de hoy”, dijo Wang Ying:
“La hermana no te retendrá”
“No es necesario”, Lin Yi dijo:
“Llámame si tienes algo que hacer”
“Bueno”
Después de bajarse del auto, Lin Yi se fue solo.
Aunque los dos ya no tenían sentimientos entre sí, no es reconfortante encontrarse con el otro siendo infiel.
Temprano a la mañana siguiente, Lin Yi fue al Grupo Ling Yun e inesperadamente descubrió que Ji Qingyan también estaba allí.
Ji Qingyan llevaba un vestido floral de color beige, y sus esbeltas manos y brazos de jade estaban desnudos, como si fueran a brillar.
“¿Por qué estás aquí?”
Ji Qingyan sostuvo sus mejillas.
“¿No me da la bienvenida Sr. Lin? ¿Entonces me voy?”
“Está bien”, Lin Yi asintió con la cabeza.
“Si hay algo, vayamos los dos a casa y hablemos, no hace falta venir a la empresa”
“Hemos descubierto un secreto indescriptible”, bromeó He Yuanyuan:
“Jefe, no dejas que la hermana mayor venga a la empresa, ¿tienes miedo de que la hermana te controle?, por suerte hoy no llevo una falda corta de seda negra, si no sería muy fácil que me malinterpretaran”
“Tos, tos, tos …”
Qi Xianzhao tosió.
“Yuanyuan, ¿Por qué no nos sentamos los dos?”
“No seas ridículo”, Ji Qingyan le dio a Lin Yi una mirada vacía:
“Yuanyuan me pidió que viniera, quería conseguir un sistema de gestión para la empresa, así que vine para ayudar a asesorarla”
“Es un trabajo duro para la Sra. Ji”, dijo Lin Yi con una sonrisa:
“Vete a casa, cocinare para ti por la noche”
La cara de Ji Qingyan se puso más roja, se levantó, pellizcó a Lin Yi y susurró:
“Puedes preparar una buena comida, pero no digas la palabra «casa»”
“¿Cómo puedo cocinar sin ir a casa?”
“No puedo decir esas palabras, es demasiado vergonzoso”
“¿Hmm? ¿Qué tiene de vergonzoso esto?”, dijo Lin Yi:
“¿Podría ser que no te casaras en el futuro? ¿O crees que cuando los dos duerman en la cama, él bebe saldrá?”
“¡Vas a morir!”, Ji Qingyan estaba avergonzado y molesta, cuándo cambiaría la desvergüenza de Lin Yi.
“Bueno, hermana mayor, el hermano Qi y yo tenemos algo que hacer, así que nos iremos primero”, He Yuanyuan dijo:
“Hay camas para el descanso temporal en la oficina, que son bastante resistentes, así que no te preocupes”
“A dónde ir, quédate aquí”, dijo Ji Qingyan.
Si los dos se iban, sería muy difícil de explicar.
Lin Yi sonrió y se sentó en la silla.
“¿Cómo va la fundación?”
“Se ha elaborado el marco de la organización de gestión y estoy familiarizado con el modo y el proceso de operación, pronto contrataré gente”, dijo Qi Xianzhao.
“La fundación es algo que hay que hacer lo antes posible, siempre que se pueda operar de manera saludable y estable, podrán sacársela de encima lo antes posible”
“Entendido Sr. Lin”
“Jefe, ¿no dijo que querías crear una empresa de inversión, los trámites están listos y tengo la intención de registrarla en un futuro próximo, hay algo más que quieras dictar por tu parte? ¿A cuánto asciende el capital registrado?”
“Cien millones serán suficientes, aunque se puede aumentar cuando sea necesario”
“Por cierto, tengo que hablar contigo sobre algo”, dijo Ji Qingyan:
“Cuando las licencias estén todas hechas, recuerda proporcionar el papeleo pertinente y ocultar la información básica de Lin Yi”
“Hermana mayor, ¿no quiere que otros encuentren la información celestial del presidente Lin?”
Ji Qingyan asintió con la cabeza.
“Aunque todas son cosas inofensivas, pero antes de que tenga un punto de apoyo firme, debe esconderse un poco, porque cuanto más cosas expongas, peor será para ti”
“Además, cuando la empresa se haga pública, en los informes trimestrales y anuales, también oculta el nombre de Lin Yi en la medida de lo posible”
En este momento, de los presentes, Ji Qingyan era la única que era consciente de ciertos peligros en el futuro.
Cuando el panorama empresarial se estabilice gradualmente, el repentino ascenso de Lin Yi tocaría inevitablemente los intereses de innumerables personas, por lo que ocultarlo al máximo era la mejor opción.
“Oh, las comidas del Sr. Lin no son en vano, es la primera vez que veo a la hermana mayor preocuparse tanto por alguien”
“¿De qué estás hablando?”, dijo Ji Qingyan avergonzada.
“Entonces me siento un poco honrado”
“Puede que no”, dijo He Yuanyuan:
“Recuerdo que la última persona que hizo que la hermana mayor lo tratara así fue, creo, su profesor de educación física”
“¿Hmm? ¿El profesor de educación física?”
“Sí, debido a que el rendimiento físico de la hermana mayor es particularmente miserable, ayudó al profesor a contar la lista de personal de un semestre y le dio 60 puntos”
“No puede ser, ¿Qué tan mala tiene que ser para obtener 60 puntos?”
“Deja de hablar”, Ji Qingyan se levantó:
“Vete de aquí”
“Hermana mayor, aún no hemos terminado la discusión, ¿por qué se lleva al presidente Lin?”
“Hablaremos de ello en otro momento”
Dejando de lado sus palabras, Ji Qingyan arrastró a Lin Yi con ella.
Ahora Ji Qingyan ha descubierto que Lin Yi y He Yuanyuan son del mismo tipo y realmente quería apretar una cremallera sobre sus bocas.
“¿Vas a hacer pedidos hoy?”, preguntó Ji Qingyan en la puerta del edificio.
“Lo dejaré después de unos días, voy a cambiar de trabajo”
“No hagas este tipo de trabajo en el futuro y no te metas en problemas”
“Lo sé, lo tendré en mente”
Los dos charlaron durante unos minutos antes de que Ji Qingyan se dirigiera al Grupo Chaoyang.
Lin Yi encendió su teléfono y se preparó para tomar pedidos, pero en este momento, sonó el teléfono, era un número desconocido.
“Hola, ¿es el Sr. Lin Yi?”
Quien hablaba era una mujer, su voz era suave, agradable y un poco familiar.
“¿Quién es?”
“Soy Guo Rui, antes me compraste un atril y jugaste unas partidas con mi hijo”
Lin Yi recordó quién era la otra parte, su primer cliente cuando empezó su nueva carrera, y parecía ser una mujer joven.