Capitulo 07
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CAPÍTULO 7: LA ENCANTADORA QIN KEQING
Qin Keqing se sorprendió al ver a Jiang Chen. El hombre frente a ella era incluso más apuesto que Ding Peng, pero ¿por qué tenía el pelo tan corto?
Por otro lado, Jiang Chen por fin conocía a Qin Keqing.
Ella era astuta y exquisitamente hermosa, con un encanto cautivador que cambiaba constantemente. Su encanto era irresistible, con una mirada coqueta y ojos seductores que la hacían destacar de manera inigualable. Era una belleza legendaria que fascinaba y resultaba inolvidable.
Ella amó equivocadamente toda su vida, siendo una belleza con un destino cruel. Su devoción y su juramento de amor bajo el «árbol de flores amarillas» era inolvidable.
Su sufrimiento y desesperación, junto con su trágica mirada cuando talló en el árbol la frase «las flores amarillas se sonrojan por una muerte sin compasión», también era inolvidable.
Ella podía parecer increíblemente coqueta, pero al mismo tiempo, cariñosa y adorable, pero también podía dar la impresión de ser ferozmente cruel, despiadada y sin compasión. Era una existencia complicada.
Definitivamente era una mujer de una belleza sobresaliente.
Sin embargo, a los ojos de Jiang Chen, ella era una mujer astuta y calculadora, aunque aparentara ser pura y encantadora en la superficie.
Esta mujer era una experta en actuar.
«Hermano Jiang, permíteme presentártela. Ella se llama Qin Keqing, y Keqing es la joven de la que te hablé, hermano Jiang Chen.»
«Un placer, joven Jiang.»
«Un placer, señorita Qin. Es evidente que eres encantadora y cautivadora, no es de extrañar que el hermano Ding esté tan enamorado de ti.»
Estas palabras hicieron que ambos se ruborizaran un poco.
«Hermano Jiang, estás exagerando. Solo soy una mujer común.»
«Una mujer a la que el hermano Ding ha elegido no puede ser común.»
Qin Keqing bajó tímidamente la cabeza.
Después de que Qin Keqing se fue, advirtió a Ding Peng: «Hermano Ding, esta mujer tiene un origen desconocido. No confíes en ella fácilmente».
«No te preocupes, Keqing es seria conmigo. Jiang, estás pensando demasiado».
«He dicho lo que tenía que decir, mejor mantente alerta con esta mujer».
«Hermano Jiang, si sigues hablando mal de Keqing, no seremos hermanos».
¡El amor realmente puede nublar el juicio!
Al ver cómo Qin Keqing y Ding Peng se conocieron y se llevaron al principio, uno no puede evitar preguntarse, ¿y si en lugar de Liu Ruosong, Qin Keqing hubiera conocido a Ding Peng primero? ¿Habría cambiado el curso de sus destinos y resultados?
La serie no explica el trasfondo de Qin Keqing, pero al ver que ella y Liu Ruosong hicieron votos matrimoniales en el templo en ruinas y vivieron allí temporalmente, parece que su origen no era muy bueno.
Una mujer con una belleza asombrosa, pero sin el respaldo familiar y la fuerza para proteger esa belleza, muy probablemente su destino habría sido bastante difícil.
Bajo el árbol de flores amarillas, Jiang Chen y Ding Peng brindaron alegremente, mientras Qin Keqing observaba a los dos hombres desde la distancia.
«Hermano Ding, tengo un compromiso mañana y no podré asistir a tu competencia. Tengo ciertas preocupaciones. ¿Sigues siendo lo suficientemente fuerte con la espada estando tan inmerso en esta tierra de ternura?»
«Estás subestimándome demasiado, hermano Jian. Aunque Liu Ruosong es fuerte, tengo confianza en derrotarlo».
El estilo de la técnica de la espada «Estrella Fugaz celestial» es en verdad formidable, pero una vez que comprendes sus patrones, es bastante fácil de contrarrestar.
Ding Peng simplemente estaba demasiado seguro de sí mismo con respecto a la «Estrella Fugaz celestial».
Ahora, cuánta más confianza y felicidad siente, en el futuro experimentará mucha más decepción y tristeza.
Incluso si ahora le dijera a Ding Peng que no puede confiar en Qin Keqing, Ding Peng, en su estado de enamoramiento, no lo creería. En cambio, lo reprendería.
Las cosas han llegado a este punto, y cambiarlas sería muy difícil.
Qin Keqing observa a lo lejos a Jiang Chen, quien reía y hablaba animadamente.
Este hombre a veces dice cosas sorprendentes, y hay cosas que nunca había escuchado antes. Realmente es alguien con una amplia experiencia y conocimientos. Pensó Qin keqing.
Inconscientemente, ella los comparaba a ambos.
En la serie tampoco se explica cómo Qin Keqing conoció y se enamoró de Liu Ruosong. Pero supongo que al principio, ella también tenía expectativas hacia este hombre.
Esperaba que él la protegiera, que la librara del sufrimiento y las preocupaciones, que la resguardara de la deriva sin rumbo. Pero eligió al hombre equivocado.
El maestro de Liu Ruosong lo evaluó como «cobarde» hacía mucho tiempo. Y poco después de casarse, Qin Keqing experimentó la cobardía de Liu Ruosong.
Él perdió en un duelo, lo cual no era muy importante. En un duelo, se podia ganar o perder. Pero lo que realmente hizo que la gente se burlara de Liu Ruosong fue cuando se arrodilló y suplicó.
Qin Keqing presenció esta escena en una esquina de la calle.
Eso hizo que en su corazón, no pudiera evitar sentir cierta decepción.
Pero en ese momento, aún lo amaba. Por eso, intercambió su cuerpo innumerables veces por una tecnica de esgrima.
Liu Ruosong, simplemente la abrazaba por un momento y luego se ponia a estudiar las tecnicas de esgrima que ella le conseguia.
Así, la decepción en su corazón se profundizó. ¿En realidad valoraba más su fama y posición que a ella misma?
Ambos se embriagaron hasta quedar completamente ebrios.
En los días siguientes, los tres estuvieron juntos. Ding Peng se esforzó en entrenar con la espada, Jiang Chen se dedicó a practicar su cultivación interna y Qin Keqing los acompañó en silencio.
Mañana sería el día en que Ding Peng desafiaría a Liu Ruosong.
Esta noche, Qin Keqing y Ding Peng realizaron el ritual de la visita nocturna y se dirigieron juntos a Wushan bajo la lluvia.
Sin embargo, cuando Ding Peng se despertó, Qin Keqing ya no estaba allí, solo dejó una carta.
En la carta explicaba la razón de su partida y acordaba encontrarse bajo el árbol de flores amarillas a medianoche.
Una sonrisa se dibujó en el rostro de Ding Peng.
Era evidente que Qin Keqing ya estaba enamorada de él, por eso le aconsejó a Ding Peng que no fuera a la Villa Wansong.
Cuando una mujer cambia de opinión, puede hacer cualquier cosa.
En ese momento, casi traicionó a Liu Ruosong.
Jiang Chen se quedó solo bajo el árbol de flores amarillas, entrenando con su espada.
Mientras tanto, Ding Peng se dirigió solo a la Villa Wansong.
Con cada paso que daba, resonaba en su mente la promesa de encontrarse bajo el árbol de flores amarillas.
Quería terminar este duelo lo más rápido posible y luego regresar rápidamente para ver a su amada.
Ambos entraron en el salón principal de la Villa Wansong, donde todos los presentes los miraron.
Liu Ruosong estaba sentado en el trono, vistiendo una larga túnica de color verde que le daba un aire de caballero modesto.
Los líderes de las seis grandes sectas estaban de pie a un lado.
Liu Ruosong se puso de pie y se acercó a Ding Peng, disculpándose con las manos juntas:
«Joven Ding, el tiempo pasa volando, nos volvemos a encontrar.»
«Espero que el dia de hoy estes listo. No te permitiré cambiar la hora nuevamente.»
«Por supuesto que no, yo, Liu Ruosong, soy una persona de palabra. Además, el Joven Ding es una estrella brillante en el mundo de las artes marciales. También tengo ganas de medirme contigo. Por eso hoy he invitado a algunos expertos del mundo de las artes marciales para que sean testigos de nuestro enfrentamiento. No sé si el Joven Ding tendrá objeciones.»
«No me importa.»
«Nuestro duelo de hoy es simplemente un intercambio de habilidades marciales, no una lucha a muerte. Espero que el Joven Ding lo tenga en cuenta.»
…
Estas palabras eran muy grandilocuentes y daban la impresión de que Liu Ruosong era una persona honorable, como el comportamiento de un caballero.
Ding Peng se tocó la nariz y bostezó. Este tipo realmente habla mucho.
«Las armas no tienen ojos. Cuando empuño mi espada, solo quiero vencer a mi oponente. No me importa nada más.»
Ding Peng era realmente una persona simple. Al decir esto, no se daba cuenta que estaba elevando a Liu Ruosong y dando la impresión de que era un bruto valiente y desconsiderado, sin comprensión de la humildad.
Todo el mundo en este mundo está disfrazado. Si eres demasiado sincero, es fácil resultar herido.
Es importante ser amable por fuera pero firme por dentro, así es como evitarás dificultades en la vida.
Hoy, aunque Jiang Chen era amigo de Ding Peng, no asistió a la competencia.
Sabía que Ding Peng perdería el dia de hoy, pero aun así, si venía a presenciar la lucha. Si se quedaba de brazos cruzados, ¿no sería desagradable para Ding Peng?
Incluso si asistía y ayudaba, ¿cambiaria el resultado?
No es solo porque era menos conocido y tenía habilidades modestas, si lo ayudaba hipotéticamente, ambos morirán más rápido.
«Interesante, entonces empecemos.»
Apenas terminó de hablar, Ding Peng sacó su espada.